¿Sabías Que El Realizar Ejercicio Físico Exagerado Puede Tratarse De Una Adicción?

Todos hemos visto personas que están aparentemente obsesionadas con el ejercicio, las dietas y los regímenes de acondicionamiento físico, y a veces podemos preguntarnos si no están exagerando un poco.

¿Significa esto que tienen una adicción al ejercicio?

¿Existe tal cosa? Si bien puede no ser un trastorno mental formalmente clasificado como tal, comparte muchas similitudes con otras adicciones conductuales, y puede tener consecuencias perjudiciales. Aunque no existe una definición única de la adicción al ejercicio, generalmente se acepta que comprende el aislamiento social, falta de control en torno al deseo de hacer ejercicio, perjudica el funcionamiento normal de la persona y puede afectar las relaciones; es lo mismo que con otros comportamientos adictivos.

La investigación continúa sobre la adicción al ejercicio, o la adicción excesiva como se conoce de otro modo, por lo que es probable que en el futuro sea mejor entendida esta adicción.

Cómo se ve al igual que con cualquier otra adicción, una de las principales características de la adicción al ejercicio es un comportamiento compulsivo, o una necesidad, de participar en el ejercicio físico con mucha frecuencia.

Esto puede incluir realizar ejercicio varias veces al día, causándose daño físico a sí mismo por el demasiado ejercicio y anteponiendo el ejercicio a otras cosas importantes de la vida. Cuando no ha hecho ejercicio un día, es como si lo hubiera abandonado, lo que le empuja a realizar más ejercicio.

Alguien con adicción al ejercicio es probable que evite otros aspectos normales de la vida cotidiana, por miedo a no hacer suficiente ejercicio ese día.

Estas personas pueden carecer de motivación o interés en las actividades sociales que no se basan en el ejercicio y se retraen, lejos de sus contactos sociales.

Alguien con una adicción al ejercicio continuará practicándolo sin importarle nada aunque esté sufriendo de una lesión. Incluso si está lesionado y debería estar descansando, continúa realizando alguna forma de ejercicio. La adicción y la necesidad de hacer algún tipo de ejercicio será mayor que el impacto de la lesión.

Obteniendo ayuda

No hay un plan de tratamiento formal para la adicción al ejercicio, sin embargo, hay una serie de tratamientos para otras adicciones que se pueden aplicar a este caso.

Inicialmente, el adicto debe darse cuenta y aceptar que tiene un problema. Sin este primer paso vital, cualquier tratamiento posterior es poco probable que funcione. Si hay alguna lesión o problema de salud, ya sea asociado o no al ejercicio, debe ser considerado y tratado como una prioridad. A continuación, la persona necesita empezar el largo camino de cambiar sus criterios y comportamientos respecto al ejercicio.

El objetivo final es llevar al adicto a un punto donde pueda hacer ejercicio en una cantidad saludable, pero a la vez participar plenamente en la vida cotidiana. Esto puede tomar mucho tiempo, ya que la causa principal de la adicción debe ser investigada. Si la adicción ha estado presente durante mucho tiempo, va a ser difícil hacerlo, incluso con el apoyo de un profesional.

Uno de los retos en este tipo de compulsión versus digamos drogas o alcohol es que en el último caso el adicto debe abstenerse completamente de las drogas o el alcohol, pero con la adicción al ejercicio, la persona puede y debe volver a hacer ejercicio, pero en forma equilibrada y con moderación.

Si la persona tiene baja autoestima, este tendrá que ser construido, no por medio del ejercicio excesivo sino de diferente manera para obtener el mismo resultado. La familia, los amigos y la red de apoyo de la persona adicta también deben estar involucrados, ya que la adicción los afectará. Ellos serán quienes serán capaces de proporcionar el mayor nivel de apoyo al individuo, y esperar que se realice un cambio.

Conclusión

La adicción al ejercicio es una adicción muy real, y debe ser tratada como cualquier otro comportamiento adictivo ya que comparte las mismas características y opciones de tratamiento.

Afortunadamente, el pronóstico es positivo una vez que la persona ha aceptado que tiene una adicción y está listo para trabajar para lograr el cambio.

Como podemos ver, algo tan saludable como hacer ejercicios regularmente, puede volverse muy peligroso cuando se realiza en forma excesiva igual que cuando se padece de una adicción.

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